¿Que es el hombre?
“[…] Entonces Dios dijo: Hagamos al hombre a nuestra imagen; conforme a nuestra semejanza […]”
Génesis 1:26
Esta interrogante lleva muchos años dando vuelta por nuestras cabezas. La visión de qué es el hombre se puede conjugar con el pensamiento de que todo lo que vemos es una idealización de lo que realmente es, tal vez el hombre es una idealización de lo que anhela ser.
Lo que es el hombre se puede ver de variadas maneras, como por ejemplo, desde el punto de vista religioso (teológico), el punto de vista filosófico, como también del punto de vista biológico.
En este ensayo conoceremos los tres aspectos de una manera general, para logran un mayor entendimiento de está incógnita. Pero nos profundizaremos en el punto de vista religioso (teológico), ya que se adecua más a mis creencias.
Desde el punto de vista religioso podríamos decir que el hombre es un puente entre el mundo espiritual y el mundo material. Algunos dicen que el hombre es un animal racional, pero ¿Cuándo sabemos lo que es racional y lo que no lo es?, Aquí podemos aplican el principio de incertidumbre de Heisemberg, este menciona que "Lo que estudias, lo cambias", entonces, si esto es cierto, ¿Qué tanto a cambiado la realidad de lo que nos narra la historia?
Cuando nos referimos a que un individuo es un animal racional, podemos decir que, animal quiere decir que tiene relación con lo físico, con lo terrenal y carnal a la vez, pero cuando nos referimos a racional queremos señalar su alma espiritual.
El cuerpo humano es solo una parte de lo que es el hombre, la parte menos valiosa, según estudiosos del tema. Si miramos exteriormente nos damos cuenta que somos una creación divina, que a pesar de todos los cambios que hemos tendido a lo largo de los siglos, hemos logrado adaptarnos, y si miramos en nuestro interior, profundo. El cuerpo humano es el portador del alma.
En el libro “Génesis” del Antiguo Testamento, hay una declaración que dice: “Dios creó al hombre a Su imagen y semejanza”. Debido a esto algunas personas concluyeron que Dios tiene la apariencia del cuerpo humano, por lo que comenzaron a dibujarlo como lo conocemos hoy en día. Pero el hombre no es un cuerpo, el hombre es una conciencia, una unidad de energía que se percibe, que vive temporalmente en un cuerpo.
A mi entender, para la ciencia y para la filosofía misma, el hombre es el animal inteligente, respecto del animal racional. El homo sapiens, no es sino el estado evolutivo final de aquél. Ahora bien, desde el punto de vista teológico, sólo el estado de homo sapiens es el que cuenta; sólo a él pertenece el hombre de que nos habla la teología, ya que como lo vimos anteriormente, los hombres comienzan a ser hombres desde que tiene la capacidad de distinguir entre lo bueno y lo malo, lo que es o no es racional, desde que tiene la capacidad de ser racional plenamente en general.
Pero los individuos que están a punto de nacer, ¿no son hombres? Si lo seguimos viendo del mismo modo diríamos que no, ya que no es un “animal racional” y solo es un ser humano y no va a ser hombre hasta que no logre llegar a ser un ente racional, entonces una persona que nace con un problema mental, que no es capas de discernir, de saber que es o no es racional, ¿no es un hombre tampoco?
Mi ensayo me parece pertinente vincularlo con el ensayo de Max Scheler “El puesto del hombre en la tierra, o en el cosmo”.Este filósofo, hace una recolección de varios pensamientos antropológicos. Y es a partir de estos de los que va a comenzar su disertación sobre el hombre. El propósito de dar a conocer el puesto del hombre como tal, no solo dentro del mundo, sino dentro de todo el cosmos, dentro de todo el universo en si. Según este filosofo La razón ya no es la única manera por la cual podemos justificar nuestra diferencia con los animales. Por lo mismo Scheler buscará ese fundamento en el espíritu humano, capaz de hacernos ascetas (persona que se dedica particularmente a la práctica y ejercicio de la perfección espiritual), del mundo. Este ascetismo es de alguna manera, dentro de lo que el llama “tener conciencia”, poseer la voluntad para elegir, y retraernos del mundo. Esta capacidad es dada por el espíritu.
A pesar de que muchas veces decimos hombre al sexo masculino. Desde el punto de vista biológico, se puede nombrar como hombre una sola especie, Homo-sapiens.
El nombre científico alude al rasgo biológico más característico: sapiens significa "sabio" o "capaz de conocer", y se refiere a la consideración del hombre como «animal racional», al contrario que todas las otras especies. Verbi gratia , el uso de sistemas lingüísticos muy sofisticados, el razonamiento abstracto y las capacidades de introspección y especulación, uno de sus rasgos más destacados. Posiblemente esta complejidad, fundada en un aumento del tamaño del cerebro y, sobre todo, en el desarrollo del lóbulo frontal.
4 comentarios:
Este es original, espero que les guste y que les sirva para sus trabajos!
Me encantó, es muy bueno y también muy interesante, exelente trabajo!
Interesante punto de vista el de la imagen y semejanza entre Dios y el Hombre, lo que siempre se no enseña referente a nuestro cuerpo, lo que podríamos decir es la semejanza de esencia.
Otro punto es que, si tomamos el alma como sinónimo de raciocinio y como una misma cosa con el espíritu -según nuestra sociedad cristiana el hombre está compuesto por alma, cuerpo y espíritu- podríamos decir que el hombre en su estado de feto no es hombre, puesto que todavía no es capaz de decidir entre lo bueno y lo malo, en cambio si creemos que el hombre es en parte cuerpo -la sustancia-, espíritu -soplo de vida-, alma –el raciocinio- tampoco se puede señalar con precisión si el hombre antes de nacer es hombre con el sólo hecho de poseer espíritu y cuerpo.
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